Este número, coordinado por Laura Angélica Bárcenas Pozos, ve la luz en medio de cambios estructurales que se suscitan en México y que, de alguna manera, atraviesan América Latina, donde los actores de los procesos educativos miran con inquietud los fenómenos que suceden tanto al interior del aula como fuera de ésta y, al mismo tiempo, buscan esbozar horizontes de esperanza para que los menos favorecidos tengan la oportunidad de aprender y de generar ambientes que propicien su construcción humana en condiciones más favorables y menos diferentes de las de aquellos que han nacido en medio de la opulencia.